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Introducción
¿Te has dado cuenta de que tu ducha sigue soltando agua incluso cuando está cerrada? Este problema es más común de lo que parece y puede resultar no solo molesto, sino también costoso debido al desperdicio de agua. En este artículo, exploraremos las principales causas de este inconveniente y las soluciones prácticas que puedes aplicar.
Razones por las que tu ducha gotea
Problemas en la junta del grifo
Las juntas del grifo son pequeñas piezas de goma o silicona que sellan las conexiones internas. Con el tiempo, estas juntas pueden desgastarse o romperse, lo que permite que el agua se filtre incluso cuando el grifo está cerrado.
Cartucho desgastado
En las duchas con grifos monomando o mezcladores, el cartucho es el componente que regula el flujo de agua. Si está dañado o desgastado, no puede cerrar completamente el paso de agua, causando un goteo continuo.
Acumulación de sedimentos
El agua, especialmente en zonas con alto contenido de minerales, puede dejar sedimentos en las partes internas del grifo. Esto puede impedir que las piezas cierren correctamente, provocando fugas.
Exceso de presión en las tuberías
Si la presión del agua en tu hogar es demasiado alta, el sistema de la ducha podría no ser capaz de mantener el agua contenida, lo que resulta en fugas o goteos.
Cómo solucionar el problema de una ducha que gotea
- Inspección del grifo o mezclador: Antes de realizar cualquier reparación, revisa visualmente el estado del grifo o mezclador. Busca signos de desgaste, acumulación de sedimentos o piezas sueltas.
- Reemplazar la junta o el cartucho:
- Cierra el suministro de agua: Asegúrate de cortar el agua antes de desmontar la ducha.
- Desmonta el grifo: Retira las tapas decorativas y utiliza una llave adecuada para desmontar el cartucho.
- Sustituye las piezas dañadas: Cambia la junta o el cartucho según sea necesario.
- Vuelve a montar el grifo: Ajusta todas las piezas correctamente para evitar fugas.
- Limpieza de sedimentos:
- Retira las piezas internas, como el cartucho o el aireador del grifo.
- Límpialas con vinagre blanco para disolver los sedimentos.
- Enjuaga y vuelve a montar las piezas en su lugar.
- Ajuste de la presión del agua:
- Mide la presión del agua con un manómetro.
- Instala un regulador de presión si es necesario.
Consecuencias de ignorar el goteo de la ducha
No atender un goteo constante puede causar:
- Aumento en la factura del agua: Un goteo aparentemente pequeño puede desperdiciar hasta 30 litros de agua al día.
- Desgaste adicional del sistema: Las piezas internas del grifo pueden deteriorarse aún más.
- Formación de moho y hongos: La humedad constante favorece el crecimiento de moho en el área de la ducha.
Cuándo llamar a un fontanero profesional
Si has intentado las soluciones anteriores y el problema persiste, es hora de llamar a un experto. En fontanerosbaratosmadrid.com contamos con profesionales capacitados para diagnosticar y reparar problemas de goteo en tu ducha de manera rápida y económica.
Conclusión
Una ducha que suelta agua estando cerrada es un problema que no debe pasarse por alto. Desde juntas desgastadas hasta problemas de presión, identificar la causa y aplicar una solución a tiempo puede ahorrarte dinero y evitar daños mayores. Si necesitas ayuda, contacta a fontanerosbaratosmadrid.com para obtener una solución eficiente y profesional.